miércoles, 13 de mayo de 2015

Sin dolor en el amor



Quiero un hogar para mis pensamientos. 
y unas alas de quetzal para mis sueños.

 Quiero dejar de huir, 
y encontrar que en mi corazón 
no hay soplos de espanto 
o cráteres de ausencias.

 Quiero volver y dejar de extrañarte. 
te quiero libre no como panfleto. 

Quiero que mi propia vergüenza 
sea el motor de tu libertad. 

No quiero morir por vos 
en tus morenos brazos, 
abrazada a tus tristes verdes ojos. 

Quiero vivir con vos, 
     ni para vos ni por vos. 
Con vos, 
en tu arrullo volcánico, 
en tus mañanas de colibrís,
 tus tardes de lluvia, 
tus cumbres, 
tus valles. 
tus planicies repletas de árboles frutales,
                                   sobras y posibilidades.

 No quiero dolor en este amor,
      te quiero, 
y quiero que ya no duela.

jueves, 28 de agosto de 2014

...

Las calles me saben a sal
no vivo en un puerto
hace calor
mi barrio cada vez más desierto
la lluvia también se olvido de nosotros
es su venganza
estamos solos en esta ciudad
el patrón es malo
nos ha hecho creer que es nuestra culpa la miseria
el patrón también se fue
solo viene por la ganancia
aveces regresa y se da cuenta
que el perro que dejó cuidándonos
le da por hacer negocios con la competencia
(el perro nos re-vendió, tenemos más de un dueño)
Hay una señorita pidiendo cariño
y a cambio dice que da pesos
el perro se dio cuenta que esta cambiando las formas
la muerde
el cariño no existe
por eso no se pide
ciudad maldita

contexto lógico
lógica y contexto
él se levantó con índice Montecrito en la mano
buscando culpables
buscando venganza
yo le puse un espejo
lo extraño es que solo se vio mi reflejo
y entendí que la culpa la tiene el miedo
porque yo estoy aterrada

voy a salir del encierro
me voy a vestir de verso
es verde la poesía en mi armario
quizá pueda esconderme en palabras
no importa
el patrón inventó las mordidas de largo alcance
no importa
al menos caeré recitando un pasaje lejano
algo verde, feliz, y con lluvia

no estoy triste mamá
solo tengo un sueño en las manos
me dijo una anciana en la ultima hora de la madrugada
hey, hey... la que corretea palomas
pon tus manos en un teclado
no hay contexto lógico
no hay nada esta mañana
lógica no hay
este año mi octubre no será verde
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domingo, 10 de agosto de 2014

Correteando al Sol



Debiste ver el atardecer aquí,
 Yo lo vi desde mis
ventanas
Ahora hace frío, pero mi alma guarda abrigo
al recordar como sin cautela,
decidido,
irrumpió en mis ojos mantequilla
y los fue derritiendo con su cálida nostalgia,
con su calor
hasta que dejo un manantial de catarsis
que se fue haciendo humo
mientras él se fue como vino
silencioso, clandestino.

Habitada


Como en el despertar de mi piel
                          de mis sentidos
de mis conciencias:
   la de mi siempre mujer y lo de siempre

te siento diferente
    y diferente te invento,
           me invento,

me reconstruyo, no en tus brazos
                sino en los míos
   con los míos

sin poder
  ni empoderada
        ni nueva
            ni renovada

dejó mi mente el desquicio
    atrás,
mucho queda atrás
me aseguro que ni siquiera a mi memoria alcance
           
              hoy de nuevo voy a caminar

ni lluvias
    ni torrenciales
lo fatídico ya no me cabe

La alegría
  Palabra habitada
Habitada de la palabra alegría

Renacimeinto


Vio sus manos
y sintió en todo su cuerpo la impotencia.

Vio sus pies
y sintió en toda su cabeza una juventud cansada.

Se vio hacia dentro.

...y sintió que algo había muerto dentro de ella.

Entonces vio hacia atrás,
y sintió vergüenza.

supo entonces que nuevas cosas nacieron ella…

sin vuelta


Tenía miedo,
pero subí a buscarte
como quien se reta a buscar
esperando encontrarse

Relámpagos a lo lejos...
sin el ruido del trueno.
¿Serán acaso cientos de mirones
que como yo se esconden tras una cámara
para robar
(o tomar prestada al menos)
un poco de la hermosura
de esta coqueta luna de agosto?

Ella, aunque no lo creas es tímida
se esconde ahora
tras las nubes que amenazan frío

La luna me dejó
tras tristes nubes melancólicas
y yo sin poder bajar
de esta pendiente de miedo
soledad e incertidumbre.

Se llevó la luz que ilumina
el camino de vuelta.

Buenas noches luna.
tendré que dormir aquí
esperando que el
sol venga por mi-

jueves, 19 de junio de 2014

La justicia que Anna Antonia querría


-No sé, de alguna forma ella tenía la conciencia que “su lucha” -como una pequeña parte de un gran momento de las luchas- había acabado, no había más que hacer, de su parte todo estaba hecho. Esperar, solo quedaba esperar a que los niños crecieran, los dinosaurios perdieran fuerza y comenzar de nuevo. Ella sabía eso, que tras de ella la luchas seguirían. Pero le hubiese gustado tanto retirarse a ver su hija crecer. Ella había estado esperando ese momento, el momento en que su lucha acabara, esperando a que las que vienen la relevaran, ver a su hija crecer. Pero Anna Antonia se las debía desde hace tiempo, la inteligencia militar no iba a permitirle retirarse impunemente a ver a su hija crecer, no le iban a dar ese lujo. Cuando la secuestraron muchos años atrás, se les escapó, “los compas la sacaron”. Ella soportó la tortura como pocas y eso que estaba embarazada, tal vez por eso... quien sabe. Bueno, ella sabe por qué, ella esta segura por qué. Se les escapó y ahora no van a dejarla ir con su hija a verla crecer, y ella quiere tanto ver a su hija crecer. 

-Papá... ¿Cómo podés estar tan seguro, que mamá pensó todas esas cosas, antes de enfrentarse a los G2 que la asesinaron?

-Yo no creo que haya pensado eso antes del ataque. Estoy seguro que Anna Antonia pensó en todo eso durante el enfrentamiento.

-Pero... Sabes que papá, no importa. ¿Entonces?

-Anna Antonia sacó el arma de su morral. Bueno, ya hacía un rato, desde que presintió el ataque, había puesto su mano derecha sobre el arma dentro del morral. Al verlos acercarse espero el primer disparo de ellos, y al escuchar las detonaciones respondió con todo el tino que los largos y disciplinados entrenamientos, desde que era una patoja, le habían dado . No iban a dejarla ver a su hija crecer, iban a matarla ahora. No la iban a secuestrar, no la iban a llevar de nuevo a la sala de tortura, la iban a matar, la orden era precisa, pero se iba a llevar a los que pudiera con ella. No iba a permitir que su Sofia se desgastara pidiendo justicia por los autores materiales, a estos se los iba a llevar con ella, a los que pudiera...

-¡¡¡Papá!!! ¿Cómo sabes que mamá pensó todo eso? ¿Por qué...

-A ver Sofía, dejá que te termine de contar, ¿querés? Además ¿lo que dice en la carta que te dejó va por ahí no? Y claro, no se llevó a la tumba a los cuatro atacantes, pero se llevo a tres con ella, ¿que más pruebas querés hija de que esas cosas pasaban por la cabeza de tu madre?

-Bueno, pero no entiendo tu punto. ¿Lo que me intentás decir es que deje el caso ya? ¿Que no deje todo como está? ¿Que renuncie a la justicia? ¿que no haga justicia? ¿Que mamá no merece justicia porque se defendió? ¿porque tuvo entrenamiento? ¿que deje las cosas así? ¿que apueste a la impunidad? ¿que la permita papá, es eso?

-No mi amor, no. Lo que intento decirte, pero vos no me dejás terminar, es otra cosa. Lo que yo quiero decirte Sofía es que si vos querés hacer justicia, tengas claro que lo estás haciendo por vos, porque te asesinaron a tu mamá, te la quitaron cuando estaba a punto de irse a verte crecer, cuando creía que había hecho lo que tenía que hacer y ellos no la dejarón. Entonces te quitaron a tu madre para que no fuera tu madre. Y podés, si querés, si te va dar paz, buscar justicia por vos. Pero que no me digás a mi que lo haces por ella, no te digás a vos que lo haces por ella, la justicia es por vos hija. Ahora, si lo que querés es justicia para ella, lucha, por ella, por vos, por el futuro, seguí caminando su camino, más no sus pasos. Sé parte hija de esa lucha grande de la que ella hablaba, sé esa otra lucha hija. Las niñas crecieron, las hijas ya pueden hacer su propia lucha. Hacé tu lucha Sofía, y le habrás dado la justicia que Anna Antonía tanto quería.